Me considero lo que se podría llamar un aficionado de la popular saga del fornido espartano de nombre Kratos, comenzada allá por el año 2005, cuando la Playstation 2. Saga que alcanzó las más altas cotas de calidad con la conclusión de la rama principal de la historia: la de los dioses del Olimpo (God of War 3). Pero como siempre en esta industria, cuando algo triunfa hay que exprimirle las tetas a la vaca hasta dejarla seca no, lo siguiente. De hecho, en esta saga en concreto, ya habíamos visto cómo Sony se llenaba los ojos del símbolo del dólar no con una, sino con dos «precuelas» para la Playstation Portable: Chain of Olympus y Ghost of Sparta.